
“El intercambio de semillas como práctica artística”
Cápsula II
BOCETO PROYECTUAL
Cápsula II
Las penas por comercializar semillas protegidas fuera de los cauces legales pueden llegar hasta a un año de cárcel y multas de hasta 400.000 euros, muchas semillas autóctonas tienen uso libre, pero dependiendo de la comunidad autónoma y la legislación pertinente, para producirlas hay que ser productor obtentor registrado. El paisaje en el que está inmerso el municipio de Faura no podría entenderse sin el trabajo de los hortelanos que cuidan huertos de naranjos y verduras que alimentan las casas de aquellas personas más conectadas a la tierra.
El intercambio de semillas como práctica artística es una línea de investigación que comienzo el año 2019 en la Muestra de Arte y Agroecología, un proyecto de Mandarina Borda. Cápsula II pretende reactivar esta línea de investigación desde la máxima expresión del arte de acción, ejecutando un proyecto a modo de Work in progress que comienza con una intervención de activar un quemador agrícola de bloques de hormigón tras limpiar un huerto abandonado, y quemar los restos en dicho elemento constructivo tan característico de la cultura cítrica del paisaje de Faura. Durante la residencia se intervendrá el quemador una vez apagado para convertirlo en un encalado banco de semillas. La acción terminará con una procesión en la que se involucrará a los vecinos que quieran intercambiar semillas con otras personas o que hayan participado previamente en las actividades programadas en el banco de semillas.
Es noble comer lo que produce la tierra, por ello hay que purificar y reivindicar el alimentarnos de lo que brota de la natura.